San Juanito, un municipio de paisajes y cascadas majestuosas
En el departamento del Meta, casi olvidado y pasando desapercibido por muchos habitantes de la región, se encuentra un territorio donde la inmensa planicie es sustituidas por imponentes montañas guardianas del Parque Nacional Natural Chingaza en el municipio de San Juanito, donde la neblina abraza un pueblo que se ha caracterizado por su compromiso y amor por el campo.
Partiendo desde Villavicencio, tras un recorrido de 97 kilómetros que se realiza, aproximadamente, en cinco horas o un poco más, dependiendo el estado de la vía, se llega a un paraíso natural de clima frío y que es habitado por los llaneros de ruana, personas campesinas de descendencia Andina y con una cultura que mezcla la sonoridad de la música carranguera y el joropo, que es enseñado desde los centros educativos.
Así desde el 2019, tras el trabajo articulado de unos jóvenes emprendedores y ayudas independientes de la comunidad, inició el proyecto “Llanero de Ruana”, una organización ambiental, cultural y finalmente agencia operadora de turismo que promueve la exuberancia natural del cañón del Guatiquía de este lugar y los valores culturales de la región.
“Creamos un proyecto empresarial llamado Llaneros de Ruana; término que nos identifica y es capaz de vivenciar lo que somos, de esta manera la comunidad se apropió de la diferencia” explico Rafael Mora, líder de la empresa, habitante del municipio y productor audiovisual.
San Juanito, erigido como municipio en 1981, se encuentra rodeado de majestuosas caídas de agua dulce y cristalina. Allí desde un mirador se puede observar cinco cascadas en verano, pero en invierno desde un mismo punto es posible ver más de 15 cascadas que oscilan entre los 200 y 400 metros de altura que se desbordan en una experiencia visual única.
En este municipio cordillanero de nutrida historia y gran devoción religiosa, distribuido en magníficos cañones, y mágicas cavernas que se pueden considerar un lugar predilecto para la espeleología y exploración geológica.
Otra ruta por conocer es la Gruta Natural del Tablón, una profunda caverna que también es considerada basílica natural por la población, la cual posee una vegetación y fauna, propia de la zona Andina, por estar en plena Cordillera.
En compañía de locales se recorre una quebrada conocida por sus pozos y cascadas hasta llegar a la Gruta Natural, mientras se escucha de la historia y biodiversidad del lugar, único por sus formaciones rocosas y que alberga en sus profundidades vívidos retratos de fósiles marinos.
El encuentro con el centro poblado es un intercambio cultural donde se une los ritmos de la música popular campesina, el calor de una comunidad hospitalaria, junto con los ritos religiosos.
Además de contar con la posibilidad de observar las extensas cosechas de frijol, papa, arveja, hortalizas y maíz, también se puede degustar esta variedad de productos transformado en deliciosos platos, hechos por manos de maestros culinarios del campo quienes también son expertos en preparar manjares como el pan de sagú, las populares Yotas y la trucha arcoíris que se cultiva en el río Guajaro.
“Llaneros de Ruana” inició por el trabajo de Rafael Mora, Diana Díaz, Julián Herrera, y Felipe Diaz, pero luego apoyaron Adrián Peña, Freimen Acevedo, Miguel Muñoz y uno de los guías más experimentado; Miller León.
Actualmente el grupo de trabajo es reducido dada la crisis económica que genero el COVID 19 pero la red de turismo comunitario que está articulada tiene ya casi 19 familias quienes hacen parte de la logística turística diferente, para encontrar la paz, tranquilidad, pero sobre todo la abundancia natural.
Los interesados en conocer San Juanito y de paso El Calvario, pueden comunicarse al WhatsApp; 3507674408 o el correo llanerosderuana@gmail.com
Y buscar en las redes sociales el @llanerosderuana.
Fotografías de Llaneros de Ruana.