Por primera vez nace un polluelo rey zamuro en el Bioparque Los Ocarros

El Bioparque Los Ocarros está celebrando desde el 27 de agosto, la llegada de un nuevo miembro. Se trata de un polluelo rey zamuro (Sarcoramphus papa), que recibirá atención especializada para garantizar el desarrollo adecuado dentro de una crianza artificial.

El nacimiento se convirtió en un acontecimiento importante dado que es la primera vez que los ejemplares de esta especie silvestre, que están protegidas en el ecoparque desde hace 11 años, ponen dos huevos.

“Por ser la primera vez que estas aves hacen sus posturas, se determinó que debían ser llevados a incubadora, ya que, al compartir hábitat con otras especies, corrían el riesgo de ser atacados” explicó Paola Beltrán médica veterinaria del Bioparque.

El pasado 3 de agosto se trasladó el primer huevo al lugar donde se realizó el proceso de incubación, con la ayuda de Lenin Céspedes, médico veterinario zootecnista de la Universidad de los Llanos dedicado en la ciudad de Villavicencio a realizar incubación de aves ornamentales y aves de corral.

El 12 de septiembre, las aves pusieron el otro huevo, que también debió ser llevado a incubación y el 27 de septiembre el primero rompió su cascarón, siendo atendido inmediatamente por los profesionales del Bioparque.

“Pasado las 24 horas empezamos a manejar una alimentación asistida, también está recibiendo baños de sol para estimularlo y él mismo empiece a pedir comida, de esta forma se garantizará su adecuado desarrollo. La idea es tenerlo lo más protegido posible con una temperatura de unos 34 grados centígrados y estar monitoreando su consumo que debe ser cada dos horas, aproximadamente”, explicó Diana Carolina Barón, bióloga de Los Ocarros.

Esta ave carroñera considerada la tercera ave americana más grande, es conocida como cóndor de la selva, cóndor real o rey zamuro. Siendo adulta posee un plumaje predominantemente blanco, con un ligero tono de rosa y amarillo, mientras que las plumas de vuelo y la cola son casi negras. Su cabeza y su cuello no tienen plumas, evitando que la carroña que come, se pegue en esta zona y le produzca infecciones.