La lechona colombiana conquista el mundo de la gastronomía

En un sorprendente giro gastronómico, la lechona, un plato emblemático de la cocina colombiana, ha sido coronada como el mejor plato de carne del mundo, según la reciente clasificación de Taste Atlas. Este sitio web de reseñas, donde gastrónomos de todo el planeta comparten sus opiniones, ha situado a la lechona en la cima, superando a icónicos platillos como la picanha brasileña, la cochinita pibil mexicana y el bife chorizo argentino.

Según la detallada descripción de Taste Atlas, la lechona es un "plato colombiano consistente en un cerdo entero asado relleno de cebollas, guisantes, papas, hierbas frescas y diversas especias." La técnica de asado prolongado asegura que la carne quede tierna y suculenta, siendo ideal para celebraciones y festividades, ya que una lechona puede alimentar hasta 100 comensales.

Créditos: RCN Radio & Viviendo Cali.

La lechona, que se encuentra disponible en diversos restaurantes de varias ciudades del país, se ha convertido en un símbolo culinario que representa la riqueza y diversidad de la gastronomía colombiana.

Taste Atlas no solo destaca la singularidad de la lechona, sino que la presenta acompañada de una fotografía impresionante de una lechona gigante, agregando que este plato típico se encuentra disponible en distintos establecimientos en varias ciudades de Colombia.

Créditos: Cambio Colombia.

La lista de los cinco mejores platos de carne del mundo, según Taste Atlas, continúa con la Picanha brasileña, un corte fresco de carne de vacuno muy solicitado; el Dongpo Pork chino, una panceta de cerdo cocinada al rojo vivo y adobada con ingredientes exquisitos; el shashlik ruso, trozos de carne marinados y asados a la parrilla; y el pappardelle con ragù di cinghiale italiano, una variante de la famosa pasta toscana cocinada a fuego lento en salsa de tomates y vino tinto.

Este reconocimiento internacional no solo enaltece la lechona colombiana, sino que también pone de relieve la diversidad culinaria que el mundo tiene para ofrecer, consolidando a la lechona como un verdadero tesoro gastronómico.