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Puerto López entra a los Guinness Récords por reforestar desde la estratósfera

  • Foto del escritor: We Love Villavo
    We Love Villavo
  • 5 ago
  • 2 Min. de lectura
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En la inmensidad del llano, donde la tierra ha sido testigo de lluvias, soles intensos y esperanza sembrada a pulso, un hecho sin precedentes acaba de marcar historia. Puerto López, corazón geográfico de Colombia, fue el punto de partida de una misión que hoy entra oficialmente al Libro Guinness de los Récords por realizar la siembra aérea más alta del mundo.


La iniciativa fue liderada por el creador de contenido científico Fáber Burgos, quien junto a un equipo de investigadores conocido como Kumanday, diseñó una operación innovadora para reforestar desde el cielo. El pasado 30 de mayo, un globo de gran altitud despegó desde la vereda El Toro, cargado con más de mil semillas encapsuladas en esferas de arcilla, listas para devolverle vida al ecosistema llanero.


El globo alcanzó una altura impresionante de 35.175 metros sobre el nivel del mar, y desde allí comenzó el descenso liberando lentamente las “bombas de vida” —semillas de especies nativas como cañafístol llanero, lluvia de oro y gualanday— diseñadas para germinar al tocar tierra.

El recorrido superó los 60 kilómetros, abarcando zonas de Ricaurte y regresando finalmente a Puerto López. Gracias a una tarjeta de telemetría desarrollada por el equipo, fue posible monitorear en tiempo real datos clave como la altitud, temperatura y presión.


Recuperar el dispositivo no fue tarea fácil, pero con el apoyo logístico de la Alcaldía de Puerto López, lograron hallarlo. Un mes después, el 30 de julio, Fáber Burgos mostró al mundo el certificado oficial de Guinness World Records.

“Estas son las únicas bombas que deberían tocar el suelo: esferas de arcilla cargadas con vida”, expresó Burgos al recibir el reconocimiento.

Esta hazaña no solo queda en los libros, sino que deja una semilla de inspiración para futuras generaciones: la ciencia y la tecnología, cuando se unen con propósito, pueden ayudar a sanar la Tierra.

 
 
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